Concluyó el II Congreso de la Abogacía Madrileña con satisfacción por parte de los organizadores del evento que cumplió sobradamente con las expectativas y objetivos marcados.
Medina Cuadros se encontraba entre los más de 1500 congresistas que asistieron a alguna de las 55 sesiones de trabajo que se celebraron a lo largo de los días 25 y 26 de abril en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid. Destacados miembros de la judicatura como el juez Eloy Velasco, además de José Antonio Marina, Pedro Duque o Javier Tebas fueron algunos de los ponentes que contribuyeron con sus intervenciones a enriquecer este encuentro y convertirlo en una referencia en el ámbito jurídico.
Más de 100 periodistas se acreditaron para seguir el evento, un detalle importante para dar cuenta del interés que generó no solo en el ámbito de la abogacía, sino para la ciudadanía en general.
Este segundo Congreso se inauguró con las palabras de la decana del Colegio de Abogados de Madrid, Sonia Gumpert, acompañada por la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes, que apostó por seguir mejorando la situación de profesión y de la Administración de la Justicia de la capital.
La decana, mostró su satisfacción al comprobar la consolidación de este foro y destacó la importancia de la abogacía en la situación actual “de ajustes, consensos y reformas. Existen síntomas claros de que se tienen que realizar ajustes en la Administración de Justicia, para lograr una mayor credibilidad entre la ciudadanía. En este periodo, la abogacía debe ocupar un lugar destacado para lograr, a través de amplios consensos y colaboración, generar cambios de calado”.
Uno de los momentos más destacados del Congreso coincidió con la presencia de Eloy Velasco, juez instructor de la Operación Lezo, que participó en el panel: “El papel de la Fiscalía en la instrucción del delito”. Rodeado de cámaras y periodistas, con el salón lleno, impartió una lección magistral sobre la instrucción penal: “en el 99 por ciento de los asuntos normales no habría ninguna diferencia si la instrucción la realiza un juez o un fiscal. El problema está en el 1 por ciento restante. Los casos en los que se investiga y se enjuicia a políticos y poderosos”, dijo.
Para el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional “más importante que la fase de averiguación y de descubrimiento a través de la práctica de diligencias, es la decisión final. Cuando tienes un acopio, un conjunto de evidencias y de pruebas, decidir si eso pasa o no a juicio oral. Es decir, si algo se sobresee o pasa a enjuiciamiento. Ese es el único gran juicio que se realiza. Y eso es juzgar”.
Rafael Catalá, Ministro de Justicia, fue el encargado de clausurar el Congreso, Catalá anunció, entre otras medidas, una futura Ley de tasas judiciales, en línea con el fallo del Tribunal Constitucional del verano de 2016, que señala que las tasas judiciales nunca pueden ser un obstáculo al acceso a la justicia.
En cuanto a la Ley de Acceso a la Abogacía, la idea del propio Ministro de Justicia es la de cambiar la prueba de examen a esta profesión que ahora es un mero test, no muy de acorde con todos los estudios y pruebas que pasa el joven abogado. “ Tenemos que pensar en algún cambio para el año que viene. Quizás sea el momento que los Colegios de Abogados se encarguen de este asunto y gestionen esta prueba de acceso, la misma, con idéntica dificultad en cualquier punto del país”, indicó.
Sobre la Ley de Justicia Gratuita, el ministro Catalá no cree que haga falta una ley nueva, “sino sobre todo mejorar los sistemas de gestión para que podamos pagar antes”.
El diputado del Colegio de Abogados, Javier Íscar de Hoyos, fue el encargado de cerrar este II Congreso de la Abogacía Madrileña. En el mensaje de clausura insistió en que “la abogacía de Madrid y su Colegio constituyen una profesión refugio, con una capacidad de respuesta para la defensa jurídica a la altura de las mejores abogacías del mundo”.
Recent Comments